El tren le cortó ¡el culito!. La ranita miró para atrás
Ranita.-"¡Mi culito!. ¿Dónde está mi culito?".
Miró en los railes, y ahí estaba su colita, y pensó
Ranita.-"¡Nooo! ¿cómo voy a dejar mi traserito ahí tirado en las vías del tren? No puedo dejarlo ahí. Ahora mismo voy y lo recogeré".
Dicho y hecho, la ranita saltó de nuevo a las railes a rescatar su culito, y cuando la estaba recogiendo vino otro tren y ¡ZAS! le cortó la cabeza.
Nunca pierdas la cabeza por un culito.
Ja, ja, ja !!
ResponderEliminarBuena ilustración..
Que la belleza no te haga perder la cabeza porque el deseo pervertirá tu corazón...
Mas bién "Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida"
Tu crecimiento depende de lo que guardes en el corazón.
"Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él. Come y bebe!! -te dirá; Mas su corazón no está contigo"