Idioma

martes, 6 de mayo de 2014

Autosabotaje

El hecho de no valorarte lo suficiente también influye en tus actos, pues genera cierta tendencia a sabotear tus esfuerzos, de manera que las cosas parecen no salir bien, incluso piensas en que tienes mala suerte o que tu dios te castiga, cuando en realidad eres tú quien se castiga a si mismo mediante comportamientos de los que no eres muy consciente.

Un ejemplo sería un alcohólico, sé, por experiencia propia, que beber es un acto propio de cada humano como es mear, es nuestra naturaleza de ser humano, este no es el problema (beber) ya que un alcohólico es consciente de su actitud de beber pero no reconoce su efecto destructivo. Beber en exceso todos los días es olvidar tu realidad, no la quieres reconocer y responsabilizarte, es una evasión de la vida.

En cuanto reconocemos hasta qué punto somos nosotros mismos, quienes nos impones dificultades, comenzamos a subsanarlos. La única manera de poner fin al autosabotaje consiste en responsabilizarnos de las decisiones y los actos que lo crearon.

Solamente cuando dejamos de culpar a otros, de nuestras circunstancias, al destino o a tu Dios, somos capaces de cambiar nuestra vida y afirmar con convicción "yo escogí estar donde estoy ahora y puedo elegir lo mejor para mi".

Hay un proverbio que es realmente simple, claro y de una inteligente perspectiva  "No hay mal que por bien no venga".

A veces, las adversidades conllevan su propia bendición, simplemente hay que hallar ventajas en las adversidades.

No hay comentarios:

Publicar un comentario